Alternativa para un almuerzo completo y sabroso.

Esta receta es una base, es mi preferida, pero se puede preparar con los ingredientes que más nos satisfagan. 

La podemos realizar con anticipación, ya sea de un día para otro que seria lo ideal porque así se compactan mejor los ingredientes y al momento de utilizar se hornea. También es posible congelar.

500 g de zucchine (Calabacines)

350 g zanahorias

1 brócoli pequeño

150 g de queso parmesano

1 L de salsa bechamel vegana

250 g de hojas de lasaña precocidas

Nuez moscada al gusto

Sal al gusto

Pimienta al gusto

Pizca de orégano

Opcional: 600 g seitán

Iniciamos lavando y cortando las flores del brócoli, las cocinamos por 10 minutos, espolvoreamos una pizca de sal y retiramos del fuego.

Rallamos a mano o con un mixer las zanahorias.  Dejamos aparte.

Lavamos, secamos y cortamos bien delgadas los zucchini o calabacines.

Los cocinamos 2-3 minutos por lado en la parrilla engrasada con un poquito de aceite y espolvoreamos un poquito de orégano.

Cortamos finamente las flores de brócoli y las colocamos junto a las zanahorias en un recipiente, espolvoreamos con sal, pimienta y orégano, revolvemos.  Dejamos aparte.

Untamos en el molde una capa de salsa bechamel.

Colocamos una base de hojas de lasaña.

Apoyamos una capa de calabacines, bechamel y parmesano.

Otra capa de hojas de lasaña, bechamel y parmesano.

Luego otra de brócoli y zanahoria, si deseamos incorporar el seitán, lo picamos finamente y lo agregamos a las verduras.

Untamos la bechamel y espolvoreamos el parmesano.

Capa de hojas de lasaña, bechamel y parmesano.

Repetimos el procedimiento hasta agotar los ingredientes.

La ultima capa es de queso parmesano.

Horneamos a 180 °C (350 °F) por 25 minutos, en la parte media.  Para que se dore podemos colocar el molde en la parte más alta del horno por otros 10 minutos.

¡Buen provecho!