Crema de Ayote y Castañas

Adoro el otoño, porque se encuentran frutos maravillosos como las castañas. Que nos permite salir a dar un paseo en el bosque, respirar aire puro y de paso recoger frutos.

Esta crema es increíblemente gustosa y completa, con tantas vitaminas y minerales, para un día frío que nos recargue el cuerpo y el alma.

Ingredientes

Para 4 personas

650 g de ayote

300 g de castañas frescas

1 cebolla blanca

350 ml de leche vegetal o leche vacuna

30 ml de aceite extra virgen de oliva

1 pizca de jengibre en polvo

Sal y pimienta al gusto

Preparación

Iniciamos con lavar muy bien las castañas, de cualquier residuo de tierra.

Las secamos.

Les hacemos un corte horizontal a cada una.

Colocamos todas las castañas en una olla y la llenamos de agua. Ponemos a hervir, bajamos el fuego a media potencia y cocinamos por aproximadamente 30-40 minutos, esto depende del tamaño y de la frescura de las castañas.

Una vez cocinadas, las sacamos una a una y las pelamos delicadamente, cuidando de dejar algunas enteras para la decoración final. Reservamos.

Ponemos el ayote, sobre una tabla de picar, lo limpiamos de todas las semillas y cáscara, lo cortamos en pedazos pequeños. Reservamos.

Picamos finamente la cebolla.

Colocamos en una olla de bordes altos, el aceite extra virgen de oliva, sofreímos a fuego dulce la cebolla.

Cuando ya nuestra cebolla está transparente, agregamos los cuadritos de ayote y los dejamos por unos 3 minutos, de manera que se sofría un poquito junto a la cebolla.

Vertemos la leche, revolvemos bien y cubrimos con tapa cocinamos por unos 20-25 minutos, dependiendo del tamaño de los cuadritos de ayote.

Unos 5 minutos antes de que termine de cocinarse el ayote, agregamos las castañas y dejamos cocinar el tiempo restante.

Dejamos aparte algunas para decoración de cada plato.

Agregamos el jengibre en polvo, la sal y pimienta al gusto.

Apagamos el fuego y pasamos la batidora de inmersión para crear nuestra deliciosa crema.

Probamos y regulamos la sal y pimienta si fuese necesario.

Servimos bien caliente y decoramos con las castañas que habíamos dejado aparte.

Nota:

Se puede conservar en refrigeración hasta 2 días dentro un recipiente bien cerrado.

¡Buen provecho!